Anna M. Potrzeszcz

Dolce far niente

Dulce amanecer de domingo. Sin tener que hacer cualquier cosa, sin tener que ir a cualquier sitio. Quedarse tranquila cuando la vida corre como loca. Enseñando a mis pensamientos a descansar un poquitín. 

Blanco y negro

El niño aprende que algo es bueno o malo. Ese conocimiento le motiva a seguir adelante. Un adulto queda atrapado en un arcoíris gris.

¿Es demasiado tarde?

Mi padre, en sus 50 años, estaba aprendiendo a nadar. O mejor dicho, le estaba enseñando a su instructor a escuchar, porque mi padre hablaba demasiado. No se avergonzaba de intentar, no le importaba lo que pensarían los demás. Decía: «tú, nena, haz lo tuyo y no mires a los demás». Aunque han pasado unos años desde que no está aquí, cuido en mí misma la capacidad de empezar desde el principio. Empezar a partir de las piezas que en el momento menos esperado se unen en un todo coherente. 

„Viva la vida”

Pensaba crear esta entrada en el día de mi cumpleaños, es decir el 6 de julio. Da la casualidad de que Frida Kahlo solía celebrar su cumpleaños el mismo día (aunque nació en un año diferente). 

Paseo matutino por la playa

Un look femenino y romántico. Llevando una blusa roja y unos pantalones cortos blancos de lino. ¡Vale la pena levantarse temprano para tener un pedacito de playa de Gdansk por uno mismo! 🙂